lunes, 23 de septiembre de 2013

Regresando de a poco...volviendo al ruedo y a nuestro rincón

Una noche de insomnio como hoy... decidí volver a entrar después de tanto tiempo.
Vi decenas de comentarios de padres que recién arrancan este camino y tienen miles de preguntas.
Y me dije...por qué no regresar a contar de Valen?...a seguir contando nuestra historia que a muchos les parece esperanzadora. Lo cual resulta así por el solo hecho de que se sienten identificados y acompañados en este camino en el que muchas veces como padres nos sentimos solos.

Yo decidí en su momento tomarme un recreo de escribir...a veces una necesita también esa soledad reparadora para ocuparse de uno mismo...por qué no?..al fin y al cabo es lo que nos hace renovar nuestras fuerzas para seguir luchando.
Mi recreo fue muy largo. Demasiadas cosas me pasaron a nivel personal que me consumieron la energía para volver a sentarme y abrirme como lo hice en cada entrada que escribí desde que creé este espacio para contar nuestra historia. Cada vez que decidía sentarme frente al teclado algo me impedía escribir...y volvía a levantarme de la silla. Una y otra vez.
Pasó mucho tiempo. Valentin esta grande, hermoso y tengo miles de cosas para contar acerca de él y de todas las cosas que pasamos juntos en este tiempo. Muchas de ellas fueron maravillosas y acrecentaron la fe que siempre tuve y que jamas perdí en él. Algunas otras no tanto. Algunos desafíos dejaron de existir (a Dios gracias por eso), otros desafíos los vinieron a reemplazar y tuvimos que asumirlos y enfrentarlos. Muchos cambios a los que nos tuvimos que acostumbrar, pero como siempre, los pudimos superar.
Muchas tristezas llegaron a nuestras vidas...tristezas que nada tienen que ver con el diagnostico..sino tristezas que forman parte de la vida y que tarde o temprano llegan. Otras tristezas también que no tienen que ser parte de la vida, pero que de todos modos irrumpen en ella.
De a poco pondré al día estas entradas llenándolas de todas esas vivencias y experiencias.
A mi no me gusta hablar de terapias. Puedo nombrar alguna que haya resultado efectiva y compartirla como mi experiencia personal..como siempre digo...que es MI EXPERIENCIA. Ello no significa que es efectiva o sirve para todos los niños diagnosticados con el mismo diagnostico que mi hijo. Como todos saben, no hay dos niños con tgd iguales. Todos tienen sus fortalezas y debilidades y son distintas unas de otras. Simplemente me gusta compartirlas, así como también me gusto y me gusta encontrarme con experiencias de otras madres que las cuentan con el mismo fin que yo. Y cuyo fin también me ayudo a mi desde este lado en su momento.
A mi me gusta hablar de Valentin, sin etiquetas..Contar acerca de sus travesuras, de sus logros, y de como cambió y cambia mi vida cada día que compartimos juntos. Ese es mi fin...ese es el fin que tiene este blog. Ojala siga ayudando a aquel que se tope con el navegando, ya sea porque tiene dudas y decide abrir este sitio para ver de qué se trata o tan solo se cruce con él por pura curiosidad o casualidad.
Valentin ya está en primer grado. Va a una escuela común (que fue tormentoso encontrar, aunque ya estábamos acostumbrados a tocar mil puertas como cuando empezó el jardín en sala de 2). Va acompañado de su maestra integradora todos los días. Entró ya sabiendo leer y escribir, sumar y restar (lo cual me deja maravillada cada día mas). Les está llendo genial. Tiene nuevos amigos que lo aceptan y comparten cada día con él. Salió escolta de la bandera este 20 de junio pasado. Está cada día mas pícaro y charlatán y su empatia crece como los centímetros que voy marcando para tener una noción de cuanto va creciendo y de lo alto que está.

Por que arranco contando esto? porque me gusta dejar esa esperanza sellada acá de que sí se puede. Sí pueden. Que como siempre digo, no hay que perder nunca la fe en ellos. No dejarse vencer por la típica pregunta: por que a mi?.
Que en vez de llorar por preguntarnos eso, deberíamos pensar (como bien decía mi mamá): y por que no a nosotros?. Vivir cada dia como un desafió que pone a prueba nuestra fortaleza, nuestra paciencia, fe y amor. Apreciar las pequeñas cosas que hacen que cuando somos testigos de algún avance de ellos creamos que estamos presenciando un pequeño milagro, que por un instante tocamos el cielo con las manos y sentirnos bendecidos por haber sido testigos de eso. Bendición que solo tenemos los papas de niños especiales. Porque nosotros nunca damos nada por sentado.
Bueno...arranqué escribiendo mucho para empezar no?. De a poco iré renovando este espacio (que ya quedó medio avejentado con tanta nueva tecnología que hay hoy en dia jeje) e iré contando más acerca de lo que pasó en este tiempo.

Pido disculpas a aquellos padres que no pude contestar aun. Tuve muchos problemas en mi bandeja de mails que me impidieron hacerlo y falta de tiempo por miles de problemas personales, además del trabajo de ser mamá soltera que trabaja, jeje. Los que quieran preguntarme algo por favor hacerlo a mi mail (el correo está en mi perfil). Me es más directo y rápido poder contestarles desde allí que tener que entrar a contestar desde acá, además...es mas seguro.

Volviendo al ruedo de a poco, como el titulo de esta entrada, me despido hasta otro momento.

Gracias!..abrazos y besos.